El Ministerio de Energía y Minas obtiene la certificación ISO 37001, mientras el gobierno peruano aprueba el Modelo de Integridad para fortalecer la capacidad de prevención y respuesta frente a prácticas corruptas. Un esfuerzo que refuerza la confianza ciudadana y alinea al país con estándares internacionales."
El Perú reafirma su compromiso en la lucha contra la corrupción mediante la implementación de herramientas innovadoras y estándares internacionales que fortalecen la transparencia en la gestión pública. Uno de los hitos más destacados de este esfuerzo es la reciente obtención de la Certificación Internacional ISO 37001 por parte del Ministerio de Energía y Minas (MINEM), válida para el período 2024-2027.
La certificación es un reconocimiento a la implementación de un Sistema de Gestión Antisoborno en línea con los principios de la norma ISO 37001:2016. Este sistema permite identificar, prevenir y mitigar riesgos de soborno, promoviendo una cultura organizacional basada en la integridad y la transparencia.
Paralelamente, el Decreto Supremo N° 148-2024-PCM, publicado en diciembre de 2024, oficializó la aprobación del Modelo de Integridad como una política pública integral destinada a fortalecer la capacidad de las entidades del sector público frente a prácticas corruptas y antiéticas. Este modelo introduce componentes clave como:
El ministro de Energía y Minas, Jorge Montero Cornejo, resaltó la importancia de estos avances: “La certificación ISO 37001 no solo refuerza nuestra gestión, sino que posiciona al Perú como un referente en la región en términos de transparencia y lucha contra el soborno. Es un llamado a la acción para todas las instituciones públicas”.
Por su parte, la Secretaría de Integridad Pública, encargada de supervisar la implementación del Modelo de Integridad, anunció que las evaluaciones periódicas se realizarán a través del Índice de Capacidad Preventiva frente a la Corrupción (ICP), una herramienta que permitirá medir los progresos y cerrar brechas en las políticas de integridad institucional.
La adopción de estas medidas también fortalece los compromisos del Perú en su proceso de adhesión a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). La implementación del Modelo de Integridad y el uso de la norma ISO 37001 alinean al país con las recomendaciones internacionales para la promoción de una cultura ética y responsable.
Este esfuerzo busca no solo combatir la corrupción, sino también generar confianza ciudadana en los servicios públicos, fomentando una percepción positiva sobre la gestión gubernamental y asegurando el uso eficiente de los recursos del Estado.
Con estos avances, el Perú da un paso significativo hacia la consolidación de una cultura de integridad en todos los niveles del sector público. La certificación ISO 37001 y la implementación del Modelo de Integridad no solo representan herramientas técnicas, sino un compromiso firme con el desarrollo de un país más justo, transparente y ético.
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